Irán no se doblega a las amenazas de EEUU

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Hoy, en el día del 31 aniversario del triunfo de la revolución que derrocó al dictatorial, violento, corrupto y prooccidental régimen del Sha de Persia, Ahmadineyad ha lanzado un discurso desafiante a los países que no han cesado de amenazarlos para impedir que tengan acceso al desarrollo de energía nuclear. El presidente de la república islámica ha anunciado ante una multitud de decenas de miles de personas que el país tiene capacidad suficiente para fabricar armas nucleares y que no lo hace únicamente porque no está interesado en ello. Por de pronto, el uranio que hasta la fecha se enriquecía al 3,5% va a concentrarse hasta el 20% con objeto de abastecer el reactor médico de Natanz usado para tratamientos oncológicos, cuyo combustible está a punto de agotarse.

A pesar de que todas las agencias de espionaje de EEUU certificaron que el programa militar atómico iraní se abandono hace más de un lustro, el imperio y sus aliados europeos, jaleados por Israel, no han cesado de intoxicar con propaganda en sentido contrario para fabricar un caso similar al de las armas de destrucción masiva de Irak. La inmensa mayoría de los medios de desinformación masiva están jugando al juego norteamericano a pesar del enorme ridículo y descrédito sufrido por su colosal metedura de pata (luego se quejarán de que ya no venden). Nunca tuvieron ninguna prueba de lo que afirmaban pero, al igual que con Sadam, invirtiendo la carga de la prueba, pretenden que sea Irán quien pruebe lo que no tiene, empresa prácticamente imposible si sus rivales tienen más que prefijada su opinión digan lo que digan o demuestren lo que demuestren.

Hace poco más de una semana Irán aceptó la imposición de EEUU y Francia de enriquecer su uranio 3,5% en el extranjero, aunque con ciertos matices. Deberían tener su uranio de vuelta al 20% en un plazo de 5 meses, no en 12 como ofrecían las potencias nucleares. Sin embargo, siguiendo el plan previamente marcado, ambos países dieron por rotas las todas las negociaciones y pasaron a seguir calentando el ambiente para preparar una intervención militar mediante las negociaciones para ampliar el régimen de sanciones. Pretenden que Irán se deshaga de todo su uranio enriquecido (1200 kg al 3,5%) y lo mande al exterior para eliminar las sanciones impuestas hasta la fecha pero sin demasiadas garantías de vuelta tal y como está la situación, por eso siempre han pedido intercambio simultáneos a los que se han opuesto el grupo de los 5+1.

Agentes de EEUU e Israel han asesinado a algunos ingenieros nucleares del país, han secuestrado a otros cuando han salido al extranjero. Están atizando conflictos internos confesionales, usando grupos de esos que se vinculan a al-Qaeda para atentar contra la oficialidad del estado y, finalmente, organizando desde sus embajadas y desde el exterior una revolución de colorines (en este caso el verde) para hacer caer al gobierno y a todo el régimen. Ahora queda esperar una u dos rondas más de sanciones y, si no doblegan la voluntad del país en el sentido de que renuncie a su derecho soberano, atacar las plantas nucleares provocando una catástrofe de incalculables proporciones.

En el trasfondo de todo, aunque no se quiera mencionar, el programa nuclear militar israelí para el que nadie pide inspecciones, ni sanciones, ni amenazas de intervención. Israel quiere seguir siendo el único gallo del corral y no va a permitir que ningún país de su orbe tenga el desarrollo económico o militar suficiente para hacerle sombra a su cruel y tiránico régimen teocrático, tanto o más que el de los ayatollahs.