Ya tenemos a otro de «nuestros hijos de puta» desmadrado. Musharraf acaba de dar un autogolpe de estado, ha eliminado las garantías constitucionales y, por supuesto, ha suspendido las elecciones que debían celebrarse en enero. De momento afirman que tardarán al menos un año en convocarlas aunque conociéndolo, si la presión interna y externa no son muy potentes, pueden eternizarse.
¿Y qué ha hecho este angelito nada más gozar del poder absoluto?, pues de momento lleva detenidas a medio millar de miembros de la oposición, ha suspendido las emisiones de los canales privados de televisión y las de cualquier medio que critique al régimen y sus decisiones. De igual manera, ha cesado a los jueces independientes, los ha encerrado en la Corte Suprema y ha impuesto el «estado de excepción» apoyado en la ley marcial que, a pesar de no haber sido declarada, se aplica de facto en las calles.
El titular de La Razón, nuestro diario más liberal, da una idea de por dónde irán los tiros en cuanto a las reacciones «Musharraf da un golpe contra el islamismo» reza la noticia en su edición digital. Sin embargo, la mayoría de los detenidos no son islamistas, son opositores, gentes de la Comisión de Derechos Humanos de Pakistán y miembros del tribunal que tenía que pronunciarse en breve sobre la necesidad de que Pervez Musharraf pudiera acceder o no a un nuevo mandato disfrazado de milico o de civil. Ante la duda sobre si su pronunciamiento iba a ser favorable, ha roto el tablero de juego y se ha quedado con todas las fichas de los contendientes. «Porque yo lo valgo» —dijo tras firmar la asonada.
Bhutto, la gran esperanza de occidente, tras salir indemne del intento de asesinato a manos de gentes afines al régimen e instrumentados por la agencia de inteligencia (la famosa ISI donde se formaron o apoyaron talibanes tan relevantes como Laden o Atta) de momento está en libertad y ha convocado una reunión de los líderes opositores que aún están en libertad.
Estados Unidos y Gran Bretaña, los principales aliados del dictador han criticado suavemente su decisión. Esperemos que, al menos, su respuesta esté a la altura de las habidas contra otras dictaduras, la birmana por poner un ejemplo cercano. ¿Sanciones, embargo, congelación de cuentas, condenas en el Consejo de Seguridad? Se admiten apuestas. Fijaos lo que dice, o mejor cómo lo dice, Solana:
>Estoy preocupado por la declaración del estado de emergencia en Pakistán. Reconozco las dificultades que enfrenta actualmente Pakistán en el ámbito de política interna y de seguridad. Sin embargo el desvió del proceso democrático no puede ser la solución.
Aunque es mucho peor la reacción del ministro de exteriores alemán, Frank Walter Steinmeier:
>El G8 y Alemania, actualmente presidente del grupo, apoyan a Pakistán en la lucha contra el terrorismo y en su camino de regreso a la democracia.
Simplemente escandaloso.
A saber la que están preparando,,,
El pobre Mushi está tan ocupado encarcelando opositores (no islamistas), que no le ha dado tiempo de actualizar su bonita página web:
http://www.presidentofpakistan.gov.pk/NewsEvents.aspx
Yo creo que EEUU debería invadir Pakistan. ¿Motivos?
– Tienen armas de destrucción masiva.
– Tienen terroristas islamistas radicales en su territorio.
– Durante años han apoyado y financiado a grupos yihadistas.
– Pakistán tiene un largo historial de ataques, más o menos encubiertos, a sus
vecinos (India).
– Ha traficado con materiales radiactivos para fabricación de armamento nuclear.
Sólo veo una peguilla: Creo que no tienen petróleo. A ver: Bush, Brown, Aznar
Losantos y demás «liberales»: ¿qué hacemos, invadimos, o no invadimos?
pues creo q no va a salir bien parado de todo esto
Más de 2000 detenidos, la cosa se calienta…
Desde que la CIA decidió armar hasta los dientes a «talibanes» y «muyaihidines», para luchar contra el enemigo soviético. Una zona, ya conflictiva desde la partición de la antigua India británica en dos estados, que hoy son tres por la independencia de Bangla Desh,ha pasado a se extremadamente peligrosa, sobre todo si tenemos en cuenta que uno de sus actores, pakistán, es una potencia nuclear.
Efectivamente, don Juanlu, las intenciones de este impresentable son clarísimas: se cubre con la capa de la lucha contra el terrorismo dando la entrada a Bush para que le apoye o, cuanto menos, no sea duro con él. Y luego… a cazar opositores,q ue es lo que realmente importa. Ahora tiene la ventaja de que a la Bhutto la tiene ya en el saco, al alcance de la mano y del cañón.
Lo único que modificaría yo en su entrada sería el titular: «Musharraf continúa con su golpe de Estado en Pakistán».
Un saludo.