La degeneración moral de Israel no conoce límites. Racistas, terroristas, asesinos, maltratadores, integristas, violentos… son algunos de los epítetos más suaves con que puede calificarse mayoritariamente al artificioso invento de país hecho a medida para el fraude de pueblo que dice llamarse judío. Este vídeo ha sido difundido días atrás por el grupo pacifista israelí B’Tselem, uno de los canales que tengo como favoritos en mi YouTube desde hace años.