La derecha española ha perpetrado el mayor ataque al pírrico estado de bienestar del que disfrutábamos en nuestro país y ha eliminado en alrededor de seis meses conquistas sociales que han tardado muchas decenas de años en arrancarse al capitalismo. Si el PSOE también estuvo secuestrado por los mercados y recortaba con la nariz tapada, nuestros aprendices de neocons están poniendo tanto empeño, que su programa de recortes no tiene nada que envidiarle a los acometidos en Irlanda o en Grecia. Pero lo peor es que ya sabemos qué sucede cuando se emprende el camino heleno, las medidas de recortes sólo provocarán más enfriamiento de la economía, menos consumo, menos recaudación, más pobreza, más paro, más déficit y nuevos recortes para tratar de equilibrar unas cuentas imposibles de cuadrar. Latinoamérica ya vivió una etapa de secuestro de sus finanzas en los ochenta y noventa. El resultado, guerrillas libertadoras, escuadrones de la muerte gubernamentales, intervención militar norteamericana para salvaguardar sus intereses, extrema pobreza popular… y la llegada del socialismo del siglo XXI y el ALBA como esperanza.
No hay otro camino, o regalar el país a los mercados, permitir la destrucción del estado y mandar al garete a toda una generación o retomar las riendas del país, regenerar la acción política y salir de la espiral de miseria en la que nos están sumiendo estos políticos irresponsables. De Europa no se puede esperar nada, están implicados en la destrucción de lo público. Probablemente sea necesario abandonar el euro y aplazar o dejar de pagar la deuda, la legítima y la ilegítima. Seguro que será difícil levantar cabeza, pero lo que sí sabemos es que este camino no nos llevará más que a la miseria y al sufrimiento colectivo.
Conviene recordar que este último paquete de recortes anunciados hoy se lo debemos al nefasto papel de los gestores de la banca española. Cuando veamos subidos los precios de la cesta de la compra, suprimidas las pagas de los funcionarios, reducido el subsidio de paro o atrasada la edad de jubilación, pensemos que se lo debemos a los bancos de nuestro país y a unos políticos que consienten salvarlos con el dinero de todos, socializando sus pérdidas aún a costa de sumir en la pobreza a decenas de miles de ciudadanos. Todos deberían pudrirse en la cárcel por alta traición al pueblo.
Los de Polonia lo resumieron bastante bien en este vídeo cuando se desató la crisis de Bankia:
http://youtu.be/WEu-FMS7nXo