Bajas norteamericanas en la invasión de Irak, agosto de 2007: 84

1
415

Fuente de los datos: Irak Coalition Casualties a 1 de septiembre.

Las bajas norteamericanas están manteniéndose en niveles medios de poco más de dos bajas diarias, sin embargo las iraquíes alcanzan niveles de auténtico genocidio. Dependiendo de las fuentes que se consulten puede llegarse a hablar de alrededor de un millón de muertes. Sin embargo, las bajas británicas son proporcionalmente mucho mayores, ya van por 167 y eso que están en una zona shií relativamente tranquila donde el recibimiento a las tropas se suponía que iba a ser con presentes y alfombras de flores.

Hoy mismo al Sadr en una entrevista al Independent se refiere a la presencia británica:

>Los británicos se han dado por vencidos y saben que se irán muy pronto de Irak. Se están replegando por la resistencia a la que se han enfrentado. Sin ella, se habrían quedado mucho más tiempo. Los británicos se han dado cuenta que ésta no es una guerra en la que deberían estar luchando ni una que puedan ganar. Los británicos han colocado a sus soldados en una posición peligrosa al enviarles allí, pero también han puesto a su propio país en riesgo. Se han enemistado con todos los musulmanes y ahora se enfrentan a ataques en casa por esta guerra. Ése fue su error.

Pero no es una fanfarronada de un belicoso líder, ayer mismo un general norteamericano, asesor militar de Estados Unidos declaró al periódico británico ‘Sunday Times’ que el Ejército de Reino Unido abandonará la ciudad iraquí de Basora en los próximos meses de una forma «desagradable y embarazosa».

>Lamento decir que la experiencia de Basora está destinada a convertirse en un error garrafal en la historia militar. Los insurgentes tienen el poder y en el peor de los casos perseguirán a las tropas fuera de la ciudad durante la retirada porque los milicianos quieren dar la imagen de derrota británica.

Veremos qué decide Gordon Brown en cuanto ceda el poder que dicen que tienen a las autoridades de Basora. En octubre será la cita con la cruda realidad, justo poco después de que Bush suspenda también en la convocatoria de septiembre.