Birmania Libre!

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15 Comentarios

  1. Desde que Errol Flynn se agobiase en lu jungla de carton-piedra de «Objetivo Birmania», habamos olvidado a este pais del sudeste asitico, ni siquiera su cambio de nombre a Myanmar haba sido noticiable. En una zona en permanente estado de turbulencia, por diversas razones VietNam, Laos, Camboya o Thailandia son peridicamente noticia, Birmania o Myanmar haba siempre estado en una zona oscura, una especie de limbo informativo. Las nuevas tecnologas aplicadas al mundo de la comunicacin han revelado, con crudeza, la existencia de una macabra dictadura con ms de cuatro decadas de existencia. Esperemos que su salto a las primeras pginas de actualidad sirva para que las instancias internacionales, tan deseosas de llevar la «democracia» all donde los intereses econmico-petrolferos lo hacen conveniente, no cierre los ojos ante la situacin birmana. No todos los dictadores son Saddam Hussein.

  2. jur, he estado probando moderaciones IP para trolls y spam y creo q he tocado algo mal, si no me avisas, se lo traga el sistema
    ahora debe andar ok 🙁

  3. Interesante observacin la del Estultn, Mezque, la verdad es que busqu una opinin discrepante para contrastar pero no la encontr, guay compa.

    Conste que no quise poner ninguna imagen de los monjes en el banner porque suelo desconfiar instintivamente de cualquier cosa, animal o individuo que lleve sotana. Pero lo corts no quita lo caliente… Free Burma!

    Y que Buda te oiga, Centeno 😉

  4. Mezque, que hay intereses ocultos ahora en que todo esto tenga una mayor difusin, sin duda. La brutal represin de la Junta militar en el 88 se cobr ms de 3.000 vidas y slo cosech silencio. Despus, se encontr petrleo… y ahora desde Bush hasta Olmert piden el fin de la represin en Birmania, que hay que tener valor. Pero el que esta panda de sinvergenzas ahora «se preocupen» por Birmania no puede hacer que permanezcamos en silencio ante una dictadura brutal y salvaje. Eso es lo que nos diferencia de ellos, que gritamos por igual ante la ocupacin israel o la teocracia saud (con su beneplcito) o la represin birmana (sin su beneplcito).

    Un abrazo

  5. P.D. El que Fedeguico clame en contra de la monarqua no va a hacer que cambien mis sentimientos republicanos ni me va a llevar a ocultarlos. Lo que nos mueve es radicalmente contrapuesto 😉

  6. TODO DEMUESTRA COMO LAS ELITES RELIGIOSAS SON FUNCIONALES A LAS ELITES ECONOMICAS Y FINANCIERAS,CREO Q EN TODA LA HISTORIA JAMAS SE OPUSIERON AL PODER ECONOMICO ,SIEMPRE HOSTIGARON A LOS GOBIERNOS POPULARES O COMPLOTARON CONTRA ELLOS ,LO Q PASA EN BIRMANIA ME HACE ACORDAR A LECH WALESA…

  7. las otras opiniones…

    El fracaso de la «revolucin de los monjes»
    La Junta Militar birmana extermin la revuelta de la CIA y el eje EEUU-UE ya lanz el contraataque

    El jefe de la Junta Militar, el general Than Shwe, un especialista en guerra psicolgica entrenado en Rusia.

    Domingo 07 de Octubre,
    IAR Noticias /

    Tal como ya sucedi en Bielorrusia y Kazajstn (donde los gobiernos pro-rusos exterminaron a sangre y fuego a los dos ltimos intentos de «revolucin naranja» de la CIA), la Junta Militar birmana aplast la «revolucin de los monjes» apoyada por EEUU y la UE, desoy los llamamientos de la ONU e ignor a su emisario, encarcel masivamente a los monjes budistas, impuso controles frreos sobre los medios de comunicacin, estrech el cerco sobre los seguidores de la «lder de la oposicin» sostenida por las ONG (de «derechos humanos») controladas por la CIA, y sent un precedente en el sudeste asitico: Washington y sus socios sionistas de la UE tienen vedado el ingreso y las operaciones desestabilizadoras en las reas de influencia asiticas de la sociedad estratgica Rusia-China, sostenedora del rgimen militar que gobierna Birmania. No obstante su derrota en este primer round, el eje sionista EEUU-UE ya lanz otra operacin internacional contra los militares aliados de Rusia y de China.

    Pese a relajar gradualmente la represin callejera por huida de los manifestantes, el rgimen militar birmano estrech su frreo control sobre la principal ciudad de Myanmar, mientras continuaba el viernes arrestando a decenas de personas e interrogando a cientos de detenidos durante la (calificada por la prensa sionista como) «despiadada represin» a una serie de marchas a favor de la «democracia».

    En slo 72 horas de represin callejera combinada con detenciones masivas de monjes y de opositores, acompaada de un control estricto sobre la prensa internacional sionista que «cubre los acontecimientos», la junta militar birmana abort una operacin diseada desde las usinas «democratizadoras» (lase golpistas) de Washington y sus aliados europeos, principalmente Francia y Gran Bretaa, quienes paralelamente intentaron -tambin sin xito- condenar y aislar internacionalmente a los generales desde su «bunker de control» en el Consejo de Seguridad de la ONU.

    Para los expertos, no es ningn secreto que EEUU y sus socios de la Unin Europea, utilizando la fachada de las organizaciones no gubernamentales (ONGs), vienen realizando campaas desestabilizadoras y golpes de Estado (llamados «revoluciones naranja» o «golpes populares») contra gobiernos pro-rusos en el espacio post-sovitico de Asia y Europa del Este.

    Como ya se ha revelado a travs de la historia, la maquinaria internacional EEUU-UE, durante todos esos procesos, intent sustituir a lderes nacionalistas ex soviticos por otros «ms democrticos» aliados de «occidente», como fue el caso de Yushenko en Ucrania, cuya campaa fue alevosamente financiada y dirigida desde el Departamento de Estado norteamericano, por su propia esposa, que trabaj como asesora de Bush.

    Las protestas y los movimientos de caos planificado y desestabilizacin callejeros tras comicios electorales (Georgia, Ucrania y Bielorrusia) fueron organizados por ONG financiadas y dirigidas por Washington utilizando las redes econmicas de la CIA canalizadas a travs de la USAID (Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional) , segn informes de la inteligencia rusa expuestos en el Parlamento moscovita.

    La maniobra fue ensayada en Georgia (2003) y Ucrania (2004) con las denominadas «revoluciones naranja» o «revoluciones de terciopelo», y otros tantos intentos se probaron con Kazajstn, Azerbaiyn, Uzbekistn y Bielorrusia, donde no pudieron obtener los resultados esperados.

    La prensa internacional sionista se muestra «sorprendida» por la actitud de «indiferencia» que muestran los generales birmanos frente a la presin diplomtica de EEUU y la UE para que detengan la «represin» e inicien un «dilogo pacfico» con el clero budista y la oposicin «democrtica», obviamente pro-Washington y pro-UE.

    En sus primeras declaraciones oficiales desde la visita del enviado de la ONU Ibrahim Gambari esta semana, el jefe de la Junta Militar, el general Than Shwe, un especialista en guerra psicolgica entrenado en Rusia, dijo que slo «hablara» con la activista detenida, Aung San Suu Kyi, considerada como icono de la «democracia y los derechos humanos» por EEUU y la UE, si ella abandona sus «medidas de obstruccin».

    Than Shwe dijo a Gambari, el emisario de la ONU (o sea, el operador de EEUU y la UE) que Suu Kyi, que estuvo detenida durante 12 de los ltimos 18 aos, es «conflictiva» y est a favor de la «absoluta devastacin», seal la televisin estatal, sin explicar el contenido de esa acusacin.

    De cualquier manera, la llamada «prensa occidental», particularmente de EEUU y Europa, interpreta que los jefes militares apoyan su actitud de soberbia y «no negociacin» luego de tomar el control por medio de represiones violentas que la semana pasada, dejaron ms de 60 muertos, segn la oposicin.

    Curiosamente, esta misma prensa no se «escandaliza» con los asesinatos diarios de EEUU y la alianza sionista en Irak y Pakistn, o con las masacres rutinarias de Israel en Gaza, las que publica con ttulos y lenguaje casi «burocrtico», como si las mismas formasen parte del paisaje «normal» del mundo.

    Los analistas de las cadenas norteamericanas coinciden en que el rgimen birmano, sostenido por Rusia y China en el Consejo de Seguridad, ha dado un ejemplo emblemtico de lo que EEUU y la UE van encontrar, de ahora en ms, en sus operaciones de apoyo (y de manipulacin encubierta) a los «procesos democrticos» que impulsa Washington en reas del espacio post-sovitico controladas por gobiernos pro-rusos.

    Para un conjunto de «expertos» occidentales, la «revolucin de los monjes» en Birmania (motorizada y organizada clandestinamente por la CIA y las grandes cadenas sionistas) forma parte de la «guerra fra» por reas de influencia que mantienen Rusia y EEUU, y en la que se ve implicada China, por sus acuerdos comerciales y militares estratgicos con Rusia en Asia.

    China mantiene acuerdos comerciales, militares y energticos con Birmania, mientras que Rusia, adems de ser el principal proveedor de armas al rgimen birmano, est construyendo, por un acuerdo firmado en 2006, una planta nuclear en el pas.

    Segn Reuters, el emisario de la ONU, Gambari, fue enviado a Myanmar para «persuadir a los generales de que abandonen la represin» contra las protestas y hablen con Suu Kyi, pero las informaciones sobre abusos verbales y fsicos sugieren que Than Shwe est «prestando poca atencin a los llamamientos a la moderacin».

    En las ltimas horas los generales incrementaron el «cerco» contra los templos budistas y las «usinas» de la oposicin, a la vez que decan «estar abiertos al dilogo», mientras el representante de la ONU declaraba haber «fracasado» en su intentona de convencer a la junta castrense de que abra las compuertas de la «democracia» en Birmania (la misma «democracia» que Bush y sus socios europeos exportan -con marines incluidos- a todos aquellos pases incursos en el «eje del mal», caso de Birmania).

    El fracaso de la «revolucin de los monjes» (rplica de las «revoluciones naranja» de la CIA en Asia) se hizo ms ostensible en el curso de esta semana, y la respuesta del eje sionista EEUU-UE no se hizo esperar.

    El contraataque sionista

    Hizo punta el sucesor de Tony Blair, el primer ministro britnico, Gordon Brown, quien expres este sbado su deseo de que la Unin Europea imponga nuevas sanciones a la represin ejercida por la Junta Militar birmana contra las «protestas pacficas» encabezadas por los monjes budistas de la semana pasada.

    Entre las sanciones que impulsa el primer ministro britnico, se encuentra la prohibicin de que las empresas extranjeras inviertan en el pas asitico, y que cobren efecto inmediato, durante su discurso inaugural de la jornada mundial de protestas contra el rgimen birmano.

    «El mundo ha expresado su ira ante las atrocidades cometidas contra el pueblo birmano», declar el mandatario de la primera potencia aliada de EEUU en Europa, durante un discurso televisado tras reunirse con una delegacin de monjes en su oficina del 10 de Downing Street.

    «Quiero que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas supervise un proceso de reconciliacin en Birmania, liderado por el secretario general, y quiero que la UE establezca nuevas sanciones contra el rgimen para dejar absolutamente claro a la Junta que no toleraremos sus abusos», seal amenazante el sucesor de Blair.

    Simultneamente, EEUU, Francia y Gran Bretaa acordaron este sbado el borrador de declaracin a favor de la «reconciliacin nacional en Birmania», aunque los otros dos miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, Rusia y China, no se unieron a la iniciativa, que no se trata de otra cosa que de imponer a la junta militar la impronta de «apertura democrtica» para operar -desde adentro- otro golpe institucional «pro-occidental».

    Las potencias firmantes (el eje sionista de costumbre) aadieron que quieren organizar una accin en respuesta a la violenta represin usada por el Gobierno birmano contra la «revolucin de los monjes», tambin llamada «revolucin del azafrn».

    Los miembros del Consejo de Seguridad se reunieron a puerta cerrada despus de haber escuchado el informe del enviado especial de la ONU a Birmania, Ibrahim Gambari (desairado y casi ignorado por el gobierno militar).

    Luego de la reunin, el embajador estadounidense, Zalmay Khalilzad, remarc que Washington est preparado para «ir ms lejos» con los militares birmanos.

    «Estados Unidos est horrorizado por la brutal represin que se ha llevado a cabo por el rgimen birmano contra su propia poblacin», dijo en forma increble el representante de la potencia imperial que asesina a decenas de civiles a diario en Irak y Afganistn.

    «Si la Junta no responde a las demandas de la comunidad internacional Estados Unidos est preparado para introducir una resolucin en el Consejo de Seguridad para la imposicin de sanciones» incluyendo un embargo de armas, aadi el embajador de EEUU ante la ONU.

    En tanto, el aparato internacional de «derechos humanos» controlado por EEUU y las potencias sionistas europeas comenzaron una operacin orientada a respaldar la embestida contra la junta militar birmana lanzada desde la ONU.

    Segn la agencia AFP, miles de personas en Nueva Zelanda y Australia fueron las primeras en manifestarse este sbado contra la «represin de los militares birmanos», en una jornada mundial de protestas que tambin lleg a los pases vecinos del rgimen.

    El color dominante en esa manifestaciones era el azafrn, como el que luci en Birmania en septiembre cuando los monjes budistas lideraron las manifestaciones contra el la junta militar hasta que fueron «duramente reprimidas», seala AFP.

    Otras marchas reunieron a miles de personas en Australia, sobre todo en Sidney, y en menor medida en distintas capitales asiticas, entre ellas Bangkok, Nueva Dehli y Kuala Lumpur.

    Durante la jornada del sbado estaban previstas manifestaciones en Europa (Francia, Blgica, Espaa, Irlanda, Austria, Noruega), Canad y Estados Unidos.

    En Nueva Zelanda hubo manifestaciones en varias ciudades. Su primera ministra, Helen Clark, de visita en Europa, envi un mensaje de apoyo.

    «La poblacin birmana hizo todo lo que poda; unos fueron detenidos, otros murieron. Ahora le toca a la comunidad internacional», seal Clark.

    Siguiendo los dictados de Washington en la ONU, Andrew Beswick, responsable de Amnista Internacional (AI) en Australia, pidi un embargo de armas contra Birmania.

    «Birmanie libre» clamaban los congregados en la capital de Tailandia con fotos de la opositora y premio Nobel de la Paz, Aung San Suu Kyi.

    En India, el otro gran pas vecino de Birmania, hubo una concentracin silenciosa en Nueva Dehli. En Kuala Lumpur los manifestantes encendieron velas.

    En Sel se prev una concentracin el domingo.

    Desde Londres, la secretaria general de AI, Irene Khan, dijo que estas acciones son «necesarias para hacer visible la presin sobre las autoridades birmanas, para que paren la violencia, garanticen la seguridad de los detenidos y liberen a los presos de conciencia».

    Todo este movimiento, coordinado por medio organizaciones y ONGs internacionales (subsidiadas por la CIA y por las transnacionales, en su mayora) estn destinados a respaldar el proyecto de declaracin que impulsaron el viernes Estados Unidos, Gran Bretaa y Francia, los tres miembros permanentes occidentales del Consejo de Seguridad de la ONU, que condena «la represin violenta» ejercida por los generales birmanos.

    Como se puede apreciar, el aparato sionista diplomtico-«humanista»-meditico imperial (desplegado a nivel global) funciona con la precisin de un reloj a la hora de aislar a los malos del «eje del mal», esta vez simbolizado en la junta militar birmana, un hueso que se presenta como «duro de roer» para los impulsores de la «democracia» made in USA.

  8. ahora bien juanlu por q usa no condeno la represion de franco , pinochet o videla ?por q h kisinger los llamaba amigos y daba «luz verde » a la limpieza de la izquierda ? curiosa coinsidencia ,todos eran de derecha pro yanquees…

  9. juanlu,me meti en «iran juega a la baza de la disuacion» y no pude comentarte algo q me llama poderosamente la atencion.vos crees en los viajes astrales?como se puede estar en espaa y al mismo tiempo en los asentamientos palestinos?sabes a quien me refiero …o tiene mucha imaginacion o debe tomar de la buena..

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