Cualquier persona medianamente informada y ecuánime compartirá la aseveración del título, sin embargo nunca hasta ahora un alto dirigente norteamericano lo había reconocido en público en medio de un proceso de negociaciones de paz que oficialmente nadie da por muerto pero al que no se le conoce ni un sólo avance a pesar del tiempo que supuestamente lleva en marcha. Sin embargo hoy mismo Condi Rice se ha referido a los asentamientos como un problema para el establecimiento de un estado palestino.
Esta semana ha sido especialmente dura para el sionismo y su permanente campaña de relaciones públicas y desinformación global. De un lado el presidente Olmert ha sido obligado a declarar por la policía en un caso de fraude; por otro, el Cuarteto ha pedido la paralización de toda actividad relacionada con el crecimiento de los asentamientos ilegales existentes en Palestina, pero lo de hoy tiene otro cariz. A Bush y a su administración se les acaba el tiempo para hacer algo positivo en Oriente Medio después de haberlo incendiado por los cuatro costados para incorporar al imperio o destruir aquellos estados que aún se le resisten y proclamar la pax romana en la región. Para colmo hay una oferta de alto el fuego de Hamas sobre la mesa que seguramente rechazará el estado racista y terrorista.
No creo que que haya que lanzar las campanas al vuelo, seguramente no va a cambiar nada, pero el gesto de llamar a las cosas por su nombre es al menos digno de mención, ya que echa por tierra muchos esfuerzos de propaganda, manipulación y desinformación realizados durante lustros. No es que haya pedido el desmantelamiento de las colonias ilegales en consonancia con el derecho internacional (todas las cisjordanas), sólo la expansión de éstas y el desmantelamiento de las que Israel considera ilegales o salvajes, pero es un avance conceptual considerable. También les ha pedido que dejen de hacer paripés de concesiones y esfuerzos para la paz y, de una vez por todas, cumplan los compromisos de la Hoja de Ruta que firmaron a regañadientes.
Así que, como avancé hace tiempo en los biTs, para lo único que va a servir este proceso es para demostrar ante los ojos del mundo que Israel no quiere parar los cohetes contra el sur de su país y que no quiere permitir la formación de un estado palestino si ello significa frenar o dar marcha atrás en el permanente proceso de robo de tierras a los palestinos, sirios o libaneses. Israel es un invento colonial que sólo tiene sentido como un cáncer en expansión en Oriente Medio. No hay paz posible que no pase por el derecho al retorno de los refugiados palestinos en diáspora por el mundo y la vuelta a las fronteras anteriores al 67, a la Línea Verde, internacionalmente conocida como las únicas fronteras reales que es necesario respetar y hacer respetar. Cualquier otra cosa que nos cuenten serán juegos florales para entretener a incautos.
Hay una agenda oculta de dominar lo que les interesa de la regiónantes de que se firme ningún acuerdo de «paz», limpeiza étnica de Jerusalén, el control de todo el Jordán, las aguas del Golán y el muro. Después dirán que quieren la paz con los vecinos árabes. Livni lo ha negado, pero cualquiera que sepa leer un mapa se dará cuente de lo que digo