Chapeau France

La verdad es que enaltece ver lo que sucede en Francia. Hoy es probable que el Senado francés apruebe la reforma de las pensiones, pero, desde hace mucho no pasa un día sin movilizaciones o huelgas. Como en el mítico 68, la universidad está en la calle codo a codo con los trabajadores y estos andan dando lecciones de guerrilla urbana pacífica hasta el punto de poner de los nervios al gobierno de derechas de Sarkozy que está lanzando contra los huelguistas a cuerpos de operaciones especiales antiterroristas.

Aunque sea un argumento manido, se nota que en la república de Francia viven ciudadanos y en el estado español simples súbditos. En su día nos faltó la presencia de madame guillotine o similar para sentirnos dueños de nuestro propio destino y coger las riendas del pais.

Lo peor es que, a pesar de todo, es muy improbable que consigan parar la ola de reformas que asola Europa. Ni siquiera la patrie es hoy soberana y ni el propio y omnipotente Sarko puede decidir por sí mismo, siendo otra marioneta más de los mercados manejado a distancia por los invisibles hilos de las finanzas internacionales, por los mismos que han hundido a Occidente en esta imprevisible e inacabada crisis.

Al menos para esto están sirviendo las movilizaciones, para destapar a la dictadura del mercado y los déficit democráticos de nuestros regímenes políticos. Pero también para poner de manifiesto que los paganos de la reforma no queren soportar el peso de una crisis que no han provocado y que está siendo instrumentada para hacer retroceder los estados del bienestar alcanzados tras decenas y decenas de años de reivindicaciones ya luchas políticas y sindicales.

Animo, derrota tras derrota hasta alcanzar la victoria… 😉