Hace unos días leí en El País que habían descubierto una curiosidad histórica de alcance: que el himno nacional de España puede ser en realidad una derivación de una canción andalusí del siglo XI, la nuba Al-Istihal. La pieza la conocía bastante bien por la versión de Eduardo Paniagua, aficionado como soy a la música clásica andaluza, hoy imposible estudiar dentro de nuestras fronteras y que se puede aprender únicamente en conservatorios del norte de África; pero la verdad es que en la vida habría notado el paralelismo de motu propio. Imagino lo que supondría para nuestros integristas cristianos conservadores la confirmación de tal hecho, se les caería uno de sus mitos más sagrados. Podéis oírlo aquí mismo.
Pero hoy también hemos tenido acceso a otra información de la misma naturaleza, en el encuentro celebrado en Chaouen el 17 de marzo sobre «Los Andalusíes en la Alianza de Civilizaciones», el hispanista marroquí de origen andalusí, Mohamed Ibn Azuz Hakim, le ha recordado a Aznar el origen árabe de su apellido. Aznar deriva del topónimo árabe «hasn nar» que significaba en árabe andalusí atalaya, torre del fuego. Triste ironía para un islamófobo que se pasea por el mundo hablándonos del lo malos que son —y fueron— los musulmanes y reviviendo cuentos infantiles del hombre del saco para mentes pueriles. ¿verdad? 😆 😆 😆
De eso precisamente es lo que quería hablar en este día. Ya se que me estoy pasando con Hash nar, pero es que no puedo aguantarme. He comentado en muchas ocasiones la pura visceralidad y simplicidad del discurso de la derecha, pero es que lo de nuestro antiguo ex presidente no tiene nombre. Cuando arrecian las críticas del papel jugado por el anterior gobierno de nuestro país en el inicio de la guerra con Irak en el IV aniversario de la última fase del genocidio, se descuelga con unas declaraciones que bien podrían constituir el título de una de sus conferencias o incluso una tesis doctoral de la universidad de Georgetown. En Melbourne, Australia, Aznar dijo en su macarrónico inglés que retirar las tropas de Irak, sería equivalente a darle la victoria a Bin Laden y los suyos.
No se si el coeficiente intelectual del líder cósmico del PP es similar o inferior a la de Bush, pero desde luego la profundidad y precisión de sus argumentos es bastante comparable por lo pueril y absurdo de las mismas. Cuando le comentaba jocoso el caso a un compañero de derechas me decía que realmente Aznar lo que hace es adaptar su discurso al público al que va dirigido (sic), esto es, a sus votantes y simpatizantes. Peor, si cabe, me lo ponen.
Jeje, y que el abuelo de aznar era del PNV. Ahi!! si su abuelo levantara la cabeza!!!
Buenas noches pana.
Me he reido un rato leyendo tu entrada y coincido contigo en las situaciones tan irónicas que tiene la vida. Lo más irónico o mejor dicho dramático es quer dos enajemnados mentales como Aznarin y Bush hayan y sigan teniendo responsabilidades políticas.
Si lo piensas friamente es increible, pero, no, no…jajajajaj
Lo que es indudable es que sus nietos llevan sangre árabe, por mucho que la filtren en escuelas del OPUS, como hizo su próspero y trepa yerno: Alejandro Tariq Agag, de padre argelino. Ya lo creo que tiene razón cuando dice que nos quieren invadir los Agags del mundo: especuladores, vendedores de agenda, trepas, personajes faltos de escrúpulos…
Muy interesante no cabe duda. Por cierto, precioso himno el nuestro, bueno el anterior y original al nuestro, porque el de ahora ejem ejem… estoooo. ¿Tienes hora?. Otra cosa, más que Atalaya que le queda una harta de grande podría ser castillito de arena, ¿no es lo mismo?… lo digo por la altura, no sólo física, tu sabes. Algo simple el tipo este.
Pedrdona Juanlu.
¿ Os acordais de las acciones por una vivienda digna ?.
Ahí la primera…Fue un colectivo de Lavapies y con un frio que te cagas.
http://www.20minutos.es/noticia/214794/0/protesta/vivienda/digna/
‘Dormida’ al raso por una vivienda digna en el centro de Madrid – 20minutos.es
[…] Hace unas semanas comentaba que etimológicamente el apellido de Aznar provenía del árabe andalusí Hash nar, atalaya, torre del fuego. «Triste ironía para un islamófobo que se pasea por el mundo hablándonos del lo malos que son —y fueron— los musulmanes y reviviendo cuentos infantiles del hombre del saco para mentes pueriles», decía yo en los biTs. […]