Las fuerzas invasoras de Afganistán no ganan para disgustos. Tras el duro golpe sufrido por el ataque insurgente a los almacenes logísticos en Peshawar y la voladura de un puente en el paso de Khyber de las que dimos buena cuenta en los biTs, se ha consumado un nuevo e importante mazazo a los intereses del imperio: el cierre de la base aérea de Manás, una instalación vital para las operaciones militares en la zona, que usaba libremente desde 2001. En 180 días las tropas de EEUU y las de 11 países más, entre las que hay algún pequeño contingente español, deberán dejar completamente la instalación.
La jugada de Rusia ha sido magistral. Para empezar, se ha desecho de una base enemiga cercana a sus fronteras con lo que alivia la presión militar que EEUU y la OTAN estaban ejerciendo especialmente desde la caída del muro de Berlín. Pero también se ha ganado un nuevo aliado y, sobre todo, complica sobremanera las futuras operaciones militares norteamericanas en un momento en que acaban de reforzar con 3.000 nuevos efectivos y se espera que alrededor de mayo se envíen hasta 17.000 soldados más cumpliendo una promesa electoral de Obama. A partir de ahora, las tareas de avituallamiento serán mucho más dependientes de los intereses de Moscú, que recupera protagonismo en la solución final del agitado avispero afgano.
El parlamento de Kirguistán ha aprobado la decisión con un solo voto en contra. Las relaciones entre ambos países se han ido deteriorando progresivamente; el desencadenante final de la ruptura ha sido la pretensión kirguís de rentabilizar económicamente la cesión de soberanía que supone el establecimiento de una instalación extranjera sobre territorio propio y las continuadas negativas de EEUU a incrementar el presupuesto destinado a ello. También debe tener algo que ver el crédito de 2.000 millones otorgado por Rusia, además de otras ayudas y la condonación de buena parte de la deuda que Kirguizistán tenía contraída con el país vecino.
Las interferencias rusa han sido denunciadas por Robert Gates, el secretario de defensa de EEUU, visiblemente molesto por la complicada situación que enfrenta, sobre todo después de haber tenido que abandonar a finales de 2005 la base uzbeka de Karshi-Janabad, también por influencias de Rusia (y de China). Desde entonces Manás era la única base aérea de EEUU en Asia Central.
Se resisten…
EEUU busca acuerdo con Kirguistán por base
Sabes que es lo mejor de todo esto ? Pues que Estados Unidos esta hundiendo cada vez más la mano en el avispero de Afghanistan y cada vez lo tiene más negro para llegar a sacarla, al paso que vamos la situación de EEUU-OTAN en Afghanistan va a ser de aislamiento absoluto. Es lo que tiene estar en decadencia.
el talibán dice que la URSS murió en Afganistán y que a EEUU le pasará lo mismo…
Ya se empieza ha hablar abiertamente de derrota en Afghanistan, y ya han empezado las dimisiones. http://www.univision.com/contentroot/wirefeeds/world/7903151.html
No he podido evitar pensar en la novena companyia al ver esta entrevista.
No hay razones para que la base aérea estadounidense permanezca en Kirguizistán, afirma parlamentario
18:36 | 13/ 05/ 2009
Bishkek, 13 de mayo, RIA Novosti. El vicepresidente del comité de asuntos internacionales del Parlamento de Kirguizistán, Kabái Karabékov, declaró hoy que han vencido todos los acuerdos referentes a la base aérea que EEUU había emplazado en el territorio kirguís y que por lo tanto no hay más razones para su permanencia en el país.
El parlamentario comentó de esta manera la decisión del Senado de EEUU de destinar US$30 millones para el desarrollo de la aeronavegación de Kirguizistán si este país acepta conservar la base área estadounidense de Manás.
«El Parlamento kirguís rescindió el respectivo acuerdo con EEUU y otros once países de la coalición antiterrorista y por lo tanto no existen razones para que la base siga funcionando y permanezcan contingentes militares extranjeros en el país «, manifestó Karabékov a RIA Novosti.
Agregó que todos los acuerdos firmados anteriormente han perdido su vigencia.
Según informa la agencia Associated Press, la Casa Blanca continúa negociando con Kirguizistán el destino de la base aérea y la «secretaria de Estado, Hillary Clinton, confía en que sea alcanzado un acuerdo».
La base aérea estadounidense de Manás fue inaugurada en diciembre de 2001 por mandato de la ONU con el objetivo de apoyar la operación antiterrorista «Libertad Duradera» en Afganistán. Actualmente, en la base quedan más de 1.200 efectivos de EEUU y de algunos otros países que integran la coalición antiterrorista.
Conforme al procedimiento de rescisión del acuerdo sobre el emplazamiento de la base aérea de Manás, los militares extranjeros deberán abandonar el territorio kirguís antes del 18 de mayo, o sea, en un plazo de 180 días después de la invalidación del acuerdo.