Parece de pura broma, pero los cachorros de la OTAN le han pedido a sus jefes (¿o ha sido al revés?) que no se vayan del país. No deben estar tan resueltas las operaciones sobre el terreno para tener que solicitar más apoyo aéreo para combatir a la resistencia revolucionaria.
Y parece así atendiendo a las noticias que van llegando. De hecho, un recién nacido Frente de Liberación de Libia se ha atribuido hoy un ataque a un depósito de combustibleque ha acabado con la vida de 150 personas en Sirte, la localidad natal de Gadafi.
La tribu mayoritaria de Libia, la Warfala, una de las tres que reconocen a Saif al Islam Gadafi como líder legítimo del país, ha prometido venganza por el linchamiento del líder libio, lo que equivale a proclamar la guerra de guerrillas de largo recorrido.
Los rebeldes de al-Qaeda, la OTAN y sus mercenarios árabes están asesinando a partidarios del régimen de la yamahiriya en las cárceles de todo el país, según ha denunciado alguna ONG occidental (la cosa debe ser mucho peor aún). Sólo en Sirte se han reconocido 53 linchamientos, pero hay un clima general de abusos, violaciones, robos, y torturas por todo el país. No puede esperarse mucho más del CNT, una amalgama de integristas, terroristas y mercenarios movidos por intereses religiosos contra un gobierno laico que se han aprestado a declarar a la ley islámica, la sharía, como fuente de todo el derecho en el nuevo país: una república islámica organizada por occidente (otra vez más).
Y ya se van conociendo detalles de la procedencia de los “rebeldes”. Qatar por fin reconoce lo que era un secreto a voces, que había centenares de soldados sobre el terreno en todas las regiones del país dirigiendo a los rebeldes y coordinándolos con la OTAN, algo que habían negado en múltiples ocasiones. Quien dude del papel militar de AlJazeera como comando inicial previo a la intervención militar, aquí tiene la prueba definitiva del papel de la otrora cadena de liberación del pueblo árabe. En el mismo Qatar se está decidiendo estos días el modo de la ocupación definitiva y permanente del país, en una reunión de los jefes de Estado Mayor de los países agresores de Libia dirigidos por los EEUU, seguidos por sus subordinados de la OTAN empezando por Francia y Gran Bretaña y por Bélgica, Dinamarca, Noruega, Suecia y España, por los regímenes feudales árabes de Qatar y Emiratos Árabes Unidos bajo la supervisión de los militares sauditas y en último lugar las ratas “salafistas” mercenarias de Bengasi. De ahí saldrán bases militares, la sede del Africom y los modos de represión a los focos leales a la Yamahiría.
Pero también se conoce cómo se están llevando a cabo los negocios del petróleo en la nueva Libia: la tasa de impuestos de exportación a EEUU se ha reducido de un plumazo del 90% al 50%. Un negocio redondo… para los agresores y una nueva sangría para el pueblo libio. Esto no ha hecho sino empezar.
Qu supone la declaracin de Estado islmico en Libia?
Amanda Figueras | Madrid
Varios expertos en feminismo islmico y en Libia responden a las preguntas de ELMUNDO.es sobre qu consecuencias concretas tendra la declaracin de Estado islmico en Libia.
1. Qu supone que se declare el Estado islmico en Libia?
Natalia Andjar. Profesora de islam y Directora del rea de educacin de Junta Islmica:
El pasado domingo, Mustaf Abdul Yalil, jefe del Consejo Nacional de Transicin libio, declar que «la ‘sharia’ sera la principal fuente de legislacin en la nueva Libia. Estas declaraciones van dirigidas a calmar ciertos sectores del islamismo poltico, cuyo apoyo va a ser necesario en la configuracin del nuevo gobierno.
La prensa nos quiere hacer creer que nuestros gobiernos estn preocupados por estas declaraciones, cuando son ellos mismos los que han dado apoyo a los islamistas y han invadido Libia. No para impulsar unas revueltas civiles, sino para expoliar el pas. Occidente lleva a cabo un doble juego, segn sea el pas y el inters geopoltico.
La creacin de un discurso del miedo al islamismo fue muy til en sus alianzas con los dictadores rabes, que se presentaban como garantes de la paz social. En cambio en Afganistn los utilizaron para combatir el comunismo.
Es importante no confundir la ‘sharia’ con el ‘fiq’ (la jurisprudencia). La ‘sharia’ (etimolgicamente: va o camino que lleva a la fuente) consiste en una serie de principios generales, de hecho cada religin tiene su propia ‘sharia’. En cambio el ‘fiq’, es la jurisprudencia. Se trata de leyes humanas y por lo tanto, son modificables.
En realidad, Mustaf Abdul Yalil hace referencia al ‘fiq’. No hemos de olvidar que Abdul Yalil fue el magistrado que conden a las dos enfermeras blgaras y fue nombrado posteriormente ministro de Justicia por el propio Gadafi. As que tanto Francia como los dems pases europeos saban perfectamente con quin estaban tratando exactamente.
Como dice la antroploga Ziba Mir Husseini: «La fuerza de una interpretacin no depende de su correccin sino de las fuerzas sociales y polticas que apoyen su pretensin de autenticidad».
M. Laure Rodrguez. Presidenta de la Unin de Mujeres Musulmanas de Espaa y Directora de Torre de Babel. IV Congreso Internacional de Feminismo Islmico:
El problema no es en s que se declare el Estado islmico, sino qu interpretaciones se aplicarn. El ‘fiq’ es la jurisprudencia islmica y viene a ser una interpretacin de los textos sagrados para convertirlos en ley.
Si el Estado islmico que se quiere proclamar, toma como base el respeto al principio de igualdad y justicia de gnero inherente a la revelacin cornica no debera de existir mayor complicacin. El problema es cuando exista una injerencia del sistema patriarcal en la manera en cmo se crean y aplican esas leyes.
Oladirn Bello. Investigador de la Fundacin para las Relaciones Internacionales y el Dilogo Exterior (Fride):
Por un lado, podemos valorarlo como un intento del Consejo Nnacional de Transicin (CNT) de apaciguar a los elementos ms islamistas, que son muy influyentes en la rebelin contra Gadafi, y adems parecen ser el grupo ms organizado en la Libia sin Gadafi.
Por otra parte, debemos entender que el giro hacia un islam ms conservador es una tendencia creciente a lo largo del mundo en la que los libios no son una excepcin y cualquier gobierno deber respetar esto para restablecer el orden social. No obstante, hasta dentro de unos meses no quedar claro si se trata de una declaracin simblica o si Libia se convertir en un pas con un gobierno islamista.
Sirin Adlbi. Investigadora en Estudios Internacionales Mediterrneos de la Univ. Autnoma de Madrid:
Estado islmico, sin ms, puede tratarse de un concepto vaco si no se define y delimita su sentido, teniendo en cuenta las infinitas posibilidades de interpretacin y puesta en prctica del islam.
Puede hacer referencia tanto a una democracia inspirada en los valores progresistas y emancipatorios del islam o a una dictadura inspirada en la lectura ms retrgrada y oscurantista que pueda hacerse del mismo. Desde mi punto de vista, mal hemos comenzado si Abdul Yalil, lo nico que entiende del islam es la prohibicin del divorcio (algo que se contradice con el mismo islam) y permitir la poligamia (justo cuando nos dirigimos, en gran parte de los pases de mayora de poblacin musulmana, hacia su abolicin).
De todos modos, tampoco hay que darle ms importancia de la necesaria a este hecho, puesto que nos encontramos frente a un discurso improvisado y desafortunado, sin ninguna trascendencia legal. Lo realmente preocupante se avecina ahora tras la formacin del gobierno de transicin y la asamblea constituyente que supervisar la redaccin de una nueva constitucin o decidir optar por la adopcin de la de 1951.
El Consejo Nacional Transitorio no tiene derecho a declarar nada que no haya pasado previamente por las urnas. La prioridad en Libia debe ser en estos instantes desarmar al pueblo y crear unas estructuras jurdicas y polticas democrticas que sienten las bases para hacer posible la formacin y creacin de partidos polticos y de asociaciones civiles para reconstruir el pas y posibilitar la apertura al juego poltico libre y democrtico.
Las mujeres libias sern las perdedoras?
Natalia Andjar: En todas las guerras las mujeres son las principales perdedoras, pero tambin toda la sociedad civil en su conjunto. En este caso, el monopolio de las riquezas de Libia van a pasar a manos occidentales con la complicidad de los jefes de los clanes. Lo que menos le interesa a Occidente es la suerte de las mujeres libias, irakes o afganas. La cuestin crucial es poder coger una parte del pastel.
Malalai Joya, ex parlamentaria afgana, ha denunciado las alianzas entre las fuerzas extranjeras y los jefes de los clanes en detrimento de los derechos de las mujeres.
Lo que menos le ha interesado a Occidente es la suerte de las mujeres libias, lo que queran era poder coger una parte del pastel. Al igual que ha pasado en Irak, en Afganistn…
En cuanto a la manipulacin que hace cierto sector islamista del islam, es evidente que la justicia para las mujeres musulmanas es imposible hasta que el patriarcado no sea separado de los textos sagrados del islam y de la jurisprudencia.
M. Laure Rodrguez: Una sociedad que realiza innovaciones contrarias a los principios de igualdad, de derechos humanos y de democracia participativa presentes en la tradicin islmica de los inicios, estar mutilando a toda una sociedad a no desarrollarse libremente. Si los derechos de las mujeres son vulnerados, toda la sociedad en su conjunto se ver resentida, porque «las mujeres son la mitad gemela de los hombres» (dijo el profeta Mahoma).
Medina, que fue constituida como la primera ciudad islmica supuso un ejemplo que no siempre se sigue. Las mujeres participaban en el espacio pblico al 100% en igualdad de oportunidades. Si esto no se cumple, no se podr calificar de «Estado islmico», sino que debera de llevar otro nombre.
Oladirn Bello: Hay que ver algunos casos prcticos. La ley de Gadafi, que la establece su Libro Verde, presta atencin a la ley islmica. Por ello, los hombres pueden tomar una segunda esposa pero ha de tener el permiso de la primera esposa del primero y comparecer ante un juez. Ahora, con la declaracin del CNT se espera que sea ms fcil que los hombres tengan mltiples matrimonios. Pueden justificarlo diciendo que las mujeres que perdieron maridos durante la guerra podrn as volver a casarse con ms facilidad. Por un lado complacen a los islamistas y por otro alarman a quienes esperan una Libia secular.
Sirin Adlbi: Siendo sinceros, y tal y como hemos visto desarrollarse la cada de Gadafi y su cruel asesinato por los rebeldes, que los ha situado en este hecho al nivel del asesino con el que queran acabar y escuchando igualmente las declaraciones de Abdul Yalil, de momento no hay nada que nos permita ser optimistas a la hora de pensar en un futuro mejor tanto para las mujeres, para los nios como para los hombres en Libia. Nos situamos ante un momento crucial y sumamente peligroso para el pas.
La dictadura de Gadafi ha destrozado por completo a lo largo de los 43 aos que ha durado todas las estructuras sociales, jurdicas, polticas y estatales. Es necesario construir todo desde cero y para ello hay que tener una visin muy ntida y un proyecto slido de reconstruccin y desarrollo. Si este proyecto no se basa en la igualdad de todas y todos los ciudadanos, en la democracia, en los derechos y en la justicia social, teniendo como cuestin prioritaria e ineludible la mejora de la situacin de las mujeres, no vamos hacia ninguna parte.
Lo cual no significa que el proyecto que quieren construir no pueda basarse en el islam, sino que tanto la poblacin como la Comunidad Internacional deben presionar y ejercer el papel pertinente para que la lectura del islam que se escoja sea de carcter progresista y no se contradiga con los derechos humanos y especialmente con los derechos y la dignidad de las mujeres, y esencialmente, debe ante todo surgir del consenso y de las elecciones libres y democrticas.
dicen que maana se van los aviones y que dejan los comandos en tierra con los escuadrones de la muerte matando leales