Aumenta la tensión en el Golfo: EEUU organiza maniobras militares, Irán responde

El esquema trazado sigue fielmente los pasos. En plena campaña electoral, con las negociaciones rotas porque simplemente no pretendían negociar sino que buscaban sólo Irán renunciara al legítimo derecho que le asiste de enriquecer uranio para su programa energético civil, Usamérica ha subido un peligroso peldaño en las amenazas al régimen islámico. De momento ha enviado a varios de sus portaaviones y la flotilla de buques y submarinos que los acompaña a amenazar a Irán con un ataque militar si no se aviene a ceder parte de su soberanía a un país enemigo.

Algunos pensaban que esta provocación iba buscando organizar un nuevo TonKin, esto es, una operación encubierta donde se simularía un falso ataque a la flota (o se auto atacarían como en Cuba) para justificar el inicio de una nueva guerra al servicio básicamente de los intereses de Israel y los siocons y cristofrikis que controlan la Casa Blanca, pero al menos de momento no ha sido así.

Sin embargo Irán dista mucho de agachar las orejas. Conscientes de que lo único que puede evitar otro ataque u otra invasión es el uso de la disuasión ha organizado otras maniobras militares —Gran Profeta II— y ha lanzado con éxito los temidos misiles Shahab 2 y 3, cuyo alcance puede afectar sobradamente a Israel y atacar sus instalaciones nucleares, objetivo éste no declarado oficialmente pero bastante previsible desde los puntos de vista político y geoestratégico si, finalmente, la república es atacada para frenar su programa nuclear civil.

Aún resta más de una semana de maniobras y contramaniobras. Todo es posible. Esperemos que reine la cordura por todas las partes y no nos encontremos en breve a las puertas de una nueva guerra de consecuencias incalculables que, seguramente, no afectaría únicamente a territorio iraní.