Una de las promesas más sonadas de la campaña electoral de Obama fue la del cierrre de Guantánamo, un campo de concentración en territorio ocupado a Cuba en una suerte de limbo legal donde se mantiene a presos raptados ilegalmente en numerosos paÃses del mundo encarcelados indefinidamente sin juicio, sin cargos y sometidos a todo tipo de bárbaras torturas. Pues bien, todo indica que la macrocárcel seguirá abierta bastante tiempo y asà ha sido publicado por el Washington Post atendiendo a declaraciones de un alto funcionario del Pentágono.
Pero además, la solución adoptada por los demócratas para lavar la pésima imagen de su paÃs con la transferencia de los presos a otros estados y someterlos a juicios civiles les está saliendo rana en el terreno interno. Inglaterra ha tenido que pagar 8 millones de dólares a ex presos de Guantánamo por la complicidad de su gobierno con las torturas practicadas por EEUU. ¿En qué papel deja esto al imperio? ¿cuántos centenares de millones tendrÃan que pagar, no ya por cómplices, sino por torturadores?
Por otro lado, el primer preso juzgado por tribunales civiles norteamericanos porque supuestamente ofrecen mayores garantÃas, ha sido absuelto de la mayorÃa de los cargos de los que se les acusaba. Ahmed Ghailani fue implicado por más de 280 casos de terrorismo y el 17 de noviembre fue declarado culpable de sólo de un ellos: el de conspiración, por el que puede caerle una condena a cadena perpetua (!!). Los republicanos se suben por las paredes, la opinión pública está en contra de que los terroristas puedan salir en libertad y atenten contra ciudadanos norteamericanos y con esos miedos juegan a atacar a Obama que no está para muchos asaltos aunque, a pesar de todo, su gobierno ha anunciado que va a continuar con los juicios civiles en los que no se admiten como pruebas las declaraciones obtenidas bajo tortura en Guantánamo o ninguna otra cárcel secreta. Otro callejón sin salida para el Nobel de la Paz…